jueves, 7 de febrero de 2013

El extraño caso del Mr. Hyde y el Dr. Jackill

Las dos caras de una misma moneda. No juegan como entrenan, confunden intensidad con agresividad y compromiso con disculpa al final del partido. El bien y el mal se han juntado en una pretenciosa situación para un absurdo. Surgen los salvadores del Deportivo en tiempos revueltos, subiéndose al carro de la agitación. Ahora es cuando se necesita más coherencia y unión para que las aguas vuelvan a la senda de los resultados positivos.

Es cierto que el Deportivo no debería estar donde está en estos momentos, las cosas están difíciles pero no imposibles, confió en que los jugadores asumirán lo que les corresponde el sábado en Riazor: Compromiso y huevos. Frente al Granada debe ser el inicio del despegue de un equipo sin identidad en los últimos partidos, otra cosa puede ser catastrófica. Para conseguirlo, en primer lugar, los jugadores deben saltar al terreno de juego con mentalidad ganadora, demostrando que tienen ganas, garra y sapiencia para sacar el partido adelante. ¿Veremos al Deportivo que jugó contra el Málaga-Jeckill-o al que hizo el ridículo en Getafe-Hyde?. Se exigen medidas ya

Señalamos a los jugadores como únicos culpables de la situación, es obvio que tiene su parte de responsabilidad en el desaguisado. ¿Qué cara del Jano Bifronte veremos contra el Granada?. ¿Qué puerta se abrirá al final del partido: Primera o Segunda División?

El día 31 de diciembre a Domingos Paciencia lo presentan como el mesías prometido, lo vendieron como el top de los entrenadores. Gana al Málaga y entra en la gloria rodeado de la muchedumbre, en burra y con palmas de olivo, coreado por los entendidos de fútbol nacional e internacional. Visto lo visto, se comprueba que es una tomadura de pelo de quien lo recomendó, es más que tomadura, un rape al cero en toda regla. Se entrena con intensidad y criterio, se juega sin patrón, el equipo fue de más a menos. Viene a mi memoria aquel personaje de dibujos animados- Pierre Nodoyuna”, junto a Patán, Tontín y Tontón formaban “El escuadrón diabólico”, fallando en todas sus misiones. Cualquier semejanza con la realidad, es pura coincidencia.

El partido contra el Granada es decisivo para calibrar el grado de compromiso de los jugadores. Escucharemos en ruedas de prensa todos los tópicos conocidos-este partido lo vamos a ganar-el mismo estribillo que en partidos anteriores. Dudo mucho que los aficionados aguanten otra derrota más, de no ganar, por decencia profesional, el entrenador debe hacer las maletas y volver por el camino que llegó. Si salva al Deportivo no hace milagro alguno, para eso fue contratado, dijo que sería capaz de hacerlo, es su trabajo y punto.

Sabrá Domingos mucho mas de fútbol que yo en toda mi vida, no lo dudo, pero miles de personas sentimos los colores y el escudo del Deportivo, por esa razón, queremos que de la talla como nos lo han vendido, si no es capaz de hacerlo, que tenga la decencia profesional de dimitir, posiblemente alguien que conozca el fútbol español-no solo es Real Madrid y Barcelona- puede estar más capacitado para revertir la situación.

Si se pierde o empata, las gradas serán un hervidero de pañuelos agitándose en manos de aficionados desesperados, mostrando su malestar. Puede valer una victoria pírrica, servirá para apaciguar de momento los ánimos del respetable, será una solución momentánea, supondrá un parche, no una solución, en espera de nuevos resultados. Que nadie olvide que empieza a faltarle tiempo al Deportivo

CARLOS MUIÑOS

Mañana será un día especial para un deportivista de toda la vida, que pasa a su segundo actividad. Nos reuniremos amigos y compañeros en la comida de su despedida laboral en el Sporting Club Casino, de la calle Real. Se jubila de Fenosa, pero jamás del Deportivo. Nació su afición y cariño al Real Club Deportivo de la Coruña-porque Carlos es de “La”-cuando apenas levantaba tres palmos del suelo. Su padre fue quien lo introdujo en un amor que no conoce infidelidades, ni morirá con la muerte. Como bien dice mi hermano, amigo, confidente y compadre: “Jamás me jubilaré del Deportivo, morirá conmigo el sentimiento, aunque sé que la prolongación del mismo está en mis hijos, como yo soy la prolongación de ese amor imperecedero hacia un escudo y colores, que mi padre tuvo en vida al Real Club Deportivo de La Coruña.

En la comida se hablarán de dos temas, uno será de recuerdos y el otro el Deportivo. Después del los postres, nos conjuraremos Carlos y yo para que el sábado, los hados del sentimiento logren el milagro de la victoria, que nos permita soñar que soñamos soñando, que el equipo puede salvarse de las terribles garras de un monstruo llamado Segunda División. Sí, será un día especial para Carlos Muiños. El mejor regalo, tres puntos el sábado. Se lo merece.

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