Hablemos del Deportivo.

La crisis institucional del Deportivo está desnudando la lucha entre diversos medios de comunicación de A Coruña, a la hora de facilitar datos sobre el informe de la administración concursal. Lo que dice Goliat lo desdice David hoy y mañana es al revés. En esta guerra mediática, soy el espectador que con el programa de mano, asiste a un espectáculo que, en nada beneficia a la libertad de expresión y sobre todo, a la credibilidad informativa. Decía mi madre, mujer sabia e inteligente: Las noticias aunque aparezcan en la Hoja Parroquial y esta tuviese poca difusión, si son ciertas, llegan a los feligreses de todas las parroquias de la ciudad. Nunca en mi vida he oído cantar el gallo tantas veces como desde que el Deportivo entró en Concurso Voluntario de Acreedores. En Semana Santa, el gallo de Pedro suena con mas fuerza. Fue un gallo de corral el que cantó cuando Aportol negó que conocía al Mesías. 

En la batalla para descabalgar al "Solitario" de su caballo blanco y cinchas azules, las redes sociales han puesto de manifiesto que, las nuevas tecnologías aplicadas a la verdad, son el mejor invento del siglo. Si no fuese por ellas, el informe de la Administración Concursal del Deportivo, por citar un ejemplo, jamás llegaría a la mayoría de los ciudadanos. Han puesto en evidencia la credibilidad de quienes se enzarzan en guerras cainitas para satisfacer intereses. 

Lunes de Semana Santa. Comienza la semana menos santa del año, la más lúdica, aunque en esta ocasión por falta de recursos económicos en muchas familias, será la semana de pasión más dura de los últimos años. Los políticos se ríen de los ciudadanos que pasan por el calvario de las preferentes. Madres que solo tienen pan y leche para darles de comer a sus hijos. Desahucios de familias. Niños que solo hacen una comida al día en el colegio. ¡Joer, joder!. Y los políticos disfrutando de los días de lecer durante Semana Santa. Hablemos del Deportivo, vende mucho más que la devolución de “honores” del dios omnipotente Méndez-el de Caixa Galicia, el portugués es Mendes-no he leído ni escuchado sobre la responsabilidad de los consejeros políticos en dicha Caixa Galicia, o Caixanova, ni de los miles de euros que se llevaron a cuenta de las preferentes y ahora algunos políticos con un morro de carallo, tratan de posicionarse en la defensa de los afectados por el timo del siglo. Tendré que poner las gafas para leer la letra menuda de la injusticia social. Hablemos del Deportivo, para que hablar de los empleados de la Fábrica de Armas, o de los cientos de personas que cada día pierden su trabajo, o de los que el lunes de la próxima semana encontraran cerrada la puerta de su trabajo, o de quien no tiene que comer, o de los problemas que pueden tener los trabajadores del grupo Deportivo si c¡erran las empresas. Mejor hablar del Deportivo, coño, ¿como que del Deportivo? mejor de Lendoiro, vende más, los problemas sociales son milongas que a nadie parecen interesar. O de la violencia de género. Si el "abusador" es un fulano influyente, en aras de la libertad de expresión, el periodista al que le cuentas el problema te suelta: joder tío, hay que tener cuidado para publicar esto, no se vaya querellar. Milongas a estas alturas no son interesantes. Hablemos del Deportivo, así silenciamos a toda página que el abusador campea a sus anchas, el empresario deja sin trabajo a sus empleados, la madre robará para darle de comer a sus hijos, el político se ríe de los ciudadanos, niños que solo hacen una comida al día en el colegio. De todo lo escrito solo será noticia el robo para comer, el resto, cuidado, no vaya ser que el político se enfade y nos retiren la publicidad. Joder, la noticia del Deportivo ocupa espacios en informativos nacionales, portadas a cuatro columnas, etc. Las otras noticias, las que interesan al ciudadano, son simples notas informativas.

No existe hegemonía de la verdad, quien se crea que la posee es un necio. Los profesionales de la información-deportiva-aplicamos la ética y estética a la noticia, es obvio que “mi verdad” puede no la verdad del otro, o la del otro no ser la mía. Otra cuestión es cuando la ética viene envuelta en la estética del forro de los bolsillos del pantalón de quien la escribe o divulga vía prensa, radio o televisión. Las personas que nos dedicamos a informar y crear opinión, nos movemos en un abanico diseñado por el editor o director del medio. Que nadie mire hacia el cielo en un gesto de desaprobación, o que escriba como los ángeles mentiras desnortadas. La realidad es palpable. Los trabajadores de la información estamos sujetos a la dictadura de quien paga. La verdadera "libertad de expresión" depende de la estética del bolsillo del empresario. Las redes sociales son el único medio que permite escribir en libertad, auque algunos tipos los utilizan cobardemente para insultar. Son los menos.

Hablemos del Deportivo, de Lendoiro, del sunsun corda, menos de los problema que acucian a la sociedad, esos son milongas de arrabal. ¡Viva la libertad de expresión!.